!Ay Lunita...

¡Ay LUNITA!

Hace mucho no escribía unos versos a la luna,

porque se mostraba esquiva, como eludiéndole a una;

mas sin embargo esta noche, la abordé sin esperar

darle tiempo a que corriera… que se quisiera marchar.

Y la increpé: Mira Luna, ¿ya no me quieres mirar?

¿Es que acaso ya no gustas tú mis versos escuchar?

Y alumbrando por completo mi noche de soledad,

me dijo: “Yo no quería por Dios, hoy verte llorar”.

Sentí, dolió su respuesta, pero pude sonreír,

le agradecí su prudencia, sin más, la dejé partir.

Hasta la luna comprende mi triste pena de amor,

y lo sé porque ella espera por siempre a su amado Sol.

Su pena va con la mía, y comprende mi dolor,

y las dos hoy compartimos nuestras cuitas de amor.

Ay! Amiga quien pudiera librarnos de este dolor,

te cantaré hoy luna llena… tú, dame luz y color!

 Autora: Iris Ponce

Noviembre 30, 2019